Azerbaiyán es un país conocido por sus valores multiculturales y de tolerancia, lo cual se refleja claramente en sus normas de comportamiento religioso y ético. En el país se respeta a las diferentes religiones y creencias, y las personas, además de aceptar las diferencias mutuas, viven bajo principios de unidad social y comprensión recíproca.
La religión principal en Azerbaiyán es el Islam, y la mayoría de la población es musulmana. Sin embargo, en el país también actúan libremente minorías religiosas como cristianos ortodoxos, católicos, judíos, la comunidad albanesa-udi y otras. La Constitución garantiza la libertad religiosa y el Estado mantiene una postura neutral frente a las creencias religiosas.
Es importante mostrar respeto hacia la religión en los espacios públicos. Por ejemplo, al visitar lugares de culto (mezquitas, iglesias, sinagogas), se recomienda mantener silencio y vestir de forma limpia y apropiada. Generalmente, se espera que las mujeres usen pañuelo o velo en la mezquita. Durante ceremonias religiosas, como al llamado a la oración (azan) o en los actos de duelo, se debe mantener un comportamiento serio y silencioso, acorde a la ética social.
Las festividades de Ramadán y Kurban son celebraciones principales del Islam. Durante el mes de Ramadán, es considerado un gesto de respeto no comer en público durante el día y mostrar consideración hacia quienes ayunan.
En la sociedad azerbaiyana, la familia y el respeto hacia los mayores son valores éticos fundamentales. El trato educado, humilde y considerado entre las personas es la base de las relaciones sociales. Saludar al llegar y despedirse es una costumbre común. Dar la mano es habitual, aunque algunas personas pueden evitar el contacto físico con personas del sexo opuesto.
Hablar en voz alta, discutir o comportarse de manera agresiva en lugares públicos se considera inapropiado. El invitado es considerado sagrado en Azerbaiyán: el anfitrión suele recibirlo con cordialidad, ofrecer té y diversas delicias.
Aunque la vestimenta es generalmente libre, se recomienda usar ropa más recatada y modesta al visitar lugares religiosos o históricos. Se muestra especial respeto hacia los ancianos: sentarse antes que ellos, interrumpirlos o hablarles en voz alta se considera una falta de educación.
Estas normas de comportamiento son valiosas tanto para los locales como para los turistas que visitan el país. El respeto mutuo y la comprensión siempre ocupan un lugar fundamental en la sociedad azerbaiyana.